Gumeniuk ha precisado que el número de bombardeos desde el margen izquierdo del río Dniéper, en Jersón, hacia el otro lado es de 60 y 70 y "disminuye ligeramente día a día", mientras los proyectiles se mantiene entre 300 y 400.
"Antes había muchos más proyectiles. Ahora observamos un cierto 'modo ahorro' en su uso", ha dicho Humeniuk, quien ha celebrado cómo las consecuencias de la destrucción de instalaciones y medios logísticos rusos por parte de las Fuerzas Armadas de Ucrania "son ya visibles", recoge Ukrinform.
No obstante, ha reconocido que la situación en el frente sur continúa siendo "bastante tensa" a pesar de esta disminución de los ataques aéreos rusos, un tipo de ofensiva donde "todavía tienen ventaja" con respecto a las fuerzas ucranianas.